“Andalucía sigue siendo tan machista que no puede permitirse una crítica a la gestión de su primera presidenta”

DEL VALLE, Fernando, “Presidente, presidenta”, ABC, 4/08/2013.

«Susana Díaz, la sucesora que gobernará una región de 8 millones de habitantes gracias al voto de 20.000 militantes socialistas»

Icono CENSURED RESbaja«Por supuesto esas críticas serán elevadas a los más altos tribunales expertos en la materia. Unipersonales o colectivos. Bien regados ellos de dinero público…»

«Juzgar la gestión de la neopresidenta, atreverse a emitir opinión alguna… incurrirá en la moralmente despreciable falta tipificada como paternalismo. Meterse con la pobre chica proveniente del barrio obrero, qué fascismo tan despreciable.»

«Si la crítica sube de tono, entrarán en juego las asociaciones de mujeres progresistas cuyo peculio depende del Instituto de la Mujer que a su vez depende de la propia Susana Díaz. Para rematar, si fuera o fuese necesario, con sentencia emitida desde la cuenta tuitera de Amparo Rubiales.»

«Recordaremos aquí que el jefe de Gobierno cesante pidió, al poco de llegar al cargo, que lo llamaran “presidenta” …y resulta que cuatro años después Andalucía sigue siendo una región tan machista que no puede permitirse una crítica a la gestión de la que sí será su primera presidenta. Como todas sus políticas, ejemplar.»

Artículo:

«Se ocupó de dejarlo clarito el todavía presidente andaluz en aquella comparecencia de la semana pasada: cualquier crítica a Susana Díaz, la sucesora que gobernará una región de 8 millones de habitantes gracias al voto de 20.000 militantes socialistas, será considerada de forma automática como rasgo inequívoco del machismo rampante que aún impera en la comunidad. No lo dijo, pero estaba en el ambiente, que por supuesto esas críticas serán elevadas a los más altos tribunales expertos en la materia. Unipersonales o colectivos. Bien regados ellos de dinero público y los mejores expendedores de justicia y documentos acreditativos de progresía.

Ya saben por tanto los cronistas a qué atenerse. También la desnortada oposición, a la que dejan sin el recurso facilito. En el mejor de los casos, juzgar la gestión de la neopresidenta, atreverse a emitir opinión alguna sobre el nuevo tiempo del que gozaremos todos los andaluces -y las andaluzas-, incurrirá en la moralmente despreciable falta tipificada como paternalismo. Meterse con la pobre chica proveniente del barrio obrero, qué fascismo tan despreciable. Si la crítica sube de tono, entrarán en juego las asociaciones de mujeres progresistas cuyo peculio depende del Instituto de la Mujer que a su vez depende de la propia Susana Díaz. Para rematar, si fuera o fuese necesario, con sentencia emitida desde la cuenta tuitera de Amparo Rubiales.

En fin, resulta más que significativo que fuese Griñán el responsable de legar una afrenta tan envenenada a la persona que ha de sucederle en escasas semanas. Recordaremos aquí que el jefe de Gobierno cesante pidió, al poco de llegar al cargo que aún ocupa, que lo llamaran “presidenta”. Y pese a una acción tan importante en la defensa de la ‘igualdad’, resulta que cuatro años después Andalucía sigue siendo una región tan machista que no puede permitirse una crítica a la gestión de la que sí será su primera presidenta. Como todas sus políticas, ejemplar.»

Enlaces: http://kioskoymas.abc.es/noticias/andalucia/20130804/sevp-presidente-presidenta-20130804.html